Pedro conoció al Ejército de Salvación mientras vivía con su hermana en Long Beach. Pronto se convirtió en un líder de la iglesia, sirviendo fielmente a la comunidad durante décadas. Con una base firme y una pasión por el servicio, Pedro estaba equipado para enfrentar todos los desafíos del ministerio que uno podría esperar… Hasta el día en que se vio obligado a enfrentar su mayor desafío. Vea esta historia conmovedora de cómo Pedro pudo superar una crisis de salud que potencialmente terminaría con su ministerio en la iglesia local en la que tanto amaba servir.